NACIONAL 1 - 1 MILLOS





La urgencia manifiesta de puntos y de buen fútbol, así como la sed de victoria ante uno de sus más enconados rivales como lo es Millonarios, motivaron a que los pocos hinchas asistentes el sábado en la noche al estadio Atanasio Girardot, desencadenaran sentidas protestas frente al camerino de su equipo amado, el Atlético Nacional.

La molestia de los hinchas se dio luego del empate a un gol frente al onceno embajador, y que obligó a que jugadores y cuerpo técnico, abandonaran por la puerta de atrás el máximo escenario deportivo de los antioqueños.

El confuso y desabrido juego del actual bicampeón colombiano cuenta cada vez con menos respaldo de su afición, hasta tal punto que un partido ante los azules capitalinos, que llevaba a cerca de 40 mil aficionados, apenas reunió 15 mil hinchas.

El partido se caracterizó por numerosos errores en las zagas defensivas que permitieron múltiples opciones en uno y otro bando. Se lucieron en la mayoría de las ocasiones los arqueros Ospina y Cuadrado. Si el resultado fuera consecuente con las opciones de gol generadas por los equipos, Nacional hubiese salido mejor favorecido, pues tuvo14 opciones, contra 5 de su rival.

Pero fue el conjunto embajador el encargado de abrir primero el marcador y poner en calzas prietas a un inexpresivo, monótono y previsible Nacional, que al final tuvo de nuevo en el empuje de su lateral, Camilo Zúñiga, el salvavidas, para postergar su inevitable inmersión en una escandalosa crisis que se asumirá tarde, cuando el equipo esté eliminado tanto de los cuadrangulares del torneo local, como de la Copa Libertadores de América.

Al final, y aunque los jugadores asistieron en masa a darle la cara a la prensa como muestra de respaldo a su técnico, y este piense que por el solo hecho de que su equipo cree opciones es suficiente para continuar al frente del equipo, el descrédito entre sus seguidores se mantendrá.